Después de 19 meses y cuatro días de especulaciones y búsquedas de oportunidades, Juan Carlos I ya tiene un plan con el visto bueno de Zarzuela para regresar a España, aunque no de forma inmediata.
MARINA PINA
CREADA. 07-03-2022 | 20:30 H
FUENTE. EL MUNDO | Publicación E.M.
Después de 19 meses y cuatro días de especulaciones y búsquedas de oportunidades, Juan Carlos I ya tiene un plan con el visto bueno de Zarzuela para regresar a España, aunque no de forma inmediata.
A lo largo de seis párrafos, el Rey Juan Carlos traslada a su «querido hijo» los planes que tiene para los próximos tiempos. Don Juan Carlos comienza recordando que en 2020 se marchó de España «para facilitar el ejercicio» de las funciones de Felipe VI como Rey. «He residido en Abu Dabi, lugar al que he adaptado mi forma de vida y al cual agradezco enormemente su magnífica hospitalidad», afirma.
No ha sido hasta que el Rey emérito ha conocido el archivo de las investigaciones de la Fiscalía cuando se ha planteado qué hacer con su futuro. «Me parece oportuno considerar mi regreso a España, aunque no de forma inmediata«, dice en el tercer párrafo.
«Prefiero continuar residiendo de forma permanente en Abu Dabi», ha dicho Don Juan Carlos a su hijo, Felipe VI en una carta que se ha hecho pública este lunes. El padre del Rey asegura que en el país del Golfo ha encontrado «tranquilidad, especialmente para este periodo de mi vida», se sincera. «Como es natural, volveré con frecuencia a España, a la que siempre llevo en el corazón, para visitar a la familia y los amigos».
«Me gustaría así culminar esta etapa de mi vida desde la serenidad y la perspectiva que ofrece el tiempo transcurrido», comienza el último párrafo de la carta, en el que Don Juan Carlos insiste en su voluntad de que sus viajes a España transcurran de forma privada. «Es mi propósito organizar mi vida personal y mi lugar de residencia en ámbitos de carácter privado para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible».
Don Juan Carlos asegura en el penúltimo párrafo ser consciente «de la trascendencia para la opinión pública de los acontecimientos pasados» de su vida privada. Asegura, sobre esos acontecimientos que «lamenta sinceramente«, aunque también dice sentir «un legítimo orgullo» por su contribución a la convivencia democrática.
Por último, Don Juan Carlos trasmite de nuevo su «lealtad, cariño y orgullo» a su hijo, Felipe VI, tras pedir que haga pública la carta.
El padre de Felipe VI abandonó España el 2 de agosto de 2020 en un avión privado rumbo a Abu Dhabi. Se marchó de España sin comentárselo a casi nadie y con la idea de irse unos meses. Cinco meses antes, en marzo, la Fiscalía comenzó una investigación sobre su fortuna y los regalos recibidos mientras era Rey de España y el Rey Felipe envió un comunicado en el que rechazaba a cualquier herencia que pudiera recibir de su progenitor.
CARTA INTEGRA DE DON JUAN CARLOS
Majestad, querido hijo: En agosto de 2020, guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio a España y a todos los españoles, a sus instituciones y a ti como Rey, te comuniqué mi decisión de trasladarme fuera de España, para facilitar el ejercicio de tus funciones. Desde entonces, he residido en Abu Dabi, lugar al que he adaptado mi forma de vida y al cual agradezco enormemente su magnífica hospitalidad.
Conocidos los Decretos de la Fiscalía General del Estado, por los que se archivan las investigaciones de las que he sido objeto, me parece oportuno considerar mi regreso a España, aunque no de forma inmediata. Prefiero, en este momento, por razones que pertenecen a mi ámbito privado y que solo a mí me afectan, continuar residiendo de forma permanente y estable en Abu Dabi, donde he encontrado tranquilidad, especialmente para este período de mi vida. Aunque, como es natural, volveré con frecuencia a España, a la que siempre llevo en el corazón, para visitar a la familia y amigos.
Me gustaría así culminar esta etapa de mi vida desde la serenidad y la perspectiva que ofrece el tiempo transcurrido. Como bien sabes, en 2019 te comuniqué mi voluntad de retirarme de la vida pública, y así lo seguiré haciendo. En este sentido, tanto en mis visitas como si en el futuro volviera a residir en España, es mi propósito organizar mi vida personal y mi lugar de residencia en ámbitos de carácter privado para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible.
Soy consciente de la trascendencia para la opinión pública de los acontecimientos pasados de mi vida privada y que lamento sinceramente, como también siento un legítimo orgullo por mi contribución a la convivencia democrática y a las libertades en España, fruto del esfuerzo y sacrificio colectivo de todos los españoles.
Siempre que te parezca bien, es mi deseo que hagas pública esta carta, para conocimiento de todos los españoles y en la fecha que estimes oportuna.
Con mi lealtad, cariño y el orgullo inmenso que siento por ti.
Tu padre