Doña Letizia ha aparecido en público después de que este miércoles la Casa Real informara a través de un comunicado que el rey Felipe había dado positivo por covid y que suspendía sus actividades públicas durante los próximos siete días. El estado general de salud del monarca es bueno y a pesar de haberse infectado mantendrá su actividad institucional desde su residencia, donde permanecerá en aislamiento. Tanto la Reina como la infanta Sofía (la princesa Leonor está en un internado de Gales) no han tenido síntomas y continúan con su vida con normalidad, motivo por el que la agenda de doña Letizia sigue según lo previsto. Este viernes, la esposa de don Felipe se ha desplazado hasta Pozuelo de Alarcón (Madrid) para visitar el centro de protonterapia Quirónsalud, la primera instalación de terapia de protones en España y que supone una alternativa en la lucha contra algunos tipo de cáncer, una enfermedad con la que la Reina está especialmente sensibilizada e involucrada. Antes de acceder al recinto, ha confirmado que el Rey se encuentra muy bien.

Doña Letizia ha estrenado para la ocasión un vestido midi de flores en tono beis de manga larga y con una lazada al cuello. Se trata de un diseño de la colección 2019 de Massimo Dutti. A su entrada, los periodistas apostados en los adelaños del centro médico la han preguntado sobre cómo se encontraba su esposo. Ella se ha parado unos instantes y ha dicho que está muy bien, mientras asentía con la cabeza y se podía adivinar una sonrisa bajo la mascarilla. Luego se ha despedido de los medios con la mnao y ha entrado al centro sanitario.

Esta terapia pionera en nuestro país es segura y eficaz y es capaz de incidir en el tumor reduciendo el riesgo de dañar los tejidos sanos. Gracias al tratamiento con protones es posible tratar multitud de casos de cáncer, sobre todo de tumores cerebrales y aquellos localizados a lo largo de la columna vertebral  de aquellos que se encuentran cercanos a órganos vitales que precisan ser preservados, como los cercanos al tronco cerebral, a la vía óptica, a la médula espinal, tumores del área de cabeza y cuello, tumores en niños y cánceres recurrentes. También es útil en tumores que requieren dosis altas para ser controlados y están localizados en zonas u órganos muy sensibles a la radiación  o en tumores pediátricos, ya que los órganos en la infancia están todavía en desarrollo y son más sensibles.

Las propiedades físicas de los protones hacen que sea posible concentrar con precisión la dosis de radiación exacta por los oncólogos, logrando de esta forma una mayor actividad antitumoral y un menor daño sobre el tejido sano cercano. El equipo que se ha instalado en el centro de protonterapia Quirónsalud se llama Proteus One, un sistema único y compacto de tratamiento cuya tecnología ha sido desarrollada en Europa y reúne en una única sala multifuncional toda la tecnología necesaria en un centro oncológico. Incorpora un sistema de escaneado del tumor para facilitar al médico la aplicación de la dosis más adecuada en cada área a tratar y cuenta con los sistemas más avanzados para la toma de imágenes para control del posicionamiento del paciente. Gracias al giro de la máquina, el sistema de posicionamiento del paciente y la versatilidad de movimientos de la camilla de tratamiento robotizada, el paciente puede recibir el haz de protones desde cualquier ángulo, lo que permite la máxima precisión en el tratamiento de tumores.